Me es preciso compartir con ustedes mi punto de vista en relación a la urgente medida de actualizar nuestro Plan Regulador Comunal, para muchos la gran oportunidad de poder planificar un desarrollo territorial armónico, sustentable y consensuado por todos.
Para mí este instrumento tiene muchas herramientas que sin duda apuntan a mejorar la Comuna. A modo personal, la real necesidad de actualizar nuestro Plan Regulador es, en primer lugar, incluir en el límite urbano las zonas residenciales emplazadas a las afueras del casco urbano. Espacios que han ido creciendo con el esfuerzo individual y colectivo de las familias Puconinas, con el fin de poseer un lugar digno y propio donde desarrollarse. Familias que han esperado años este cambio de zonificación que hasta el día de hoy tienen dificultades territoriales, un carácter de ruralidad y que están lejos de todo plan e intención de urbanización a mediano plazo.
Un límite urbano que permita dar cabida a las distintas viviendas, casas de nuestros vecinos, escuelas, villas, edificaciones públicas, comercio menores y otros servicios e instalaciones que se han ido desarrollando en distintos sectores en los últimos 20 años. Inmuebles que, aunque cueste entender que estando a escasos metros del Camino Internacional o incluidos en la misma ciudad desde un plano genérico, carecen de red de agua potable, instalaciones eléctricas, servicio de alcantarillado, calles con pavimento, veredas, luminarias, grifos, plazoletas y otros aspectos básicos de urbanismo que nuestra gente tiene como derecho esencial en una sociedad (con mayor razón si somos una ciudad turística),
Esta actualización del Plan Regulador debe tener principal énfasis en las soluciones habitacionales para las más de mil familias que carecen de la tan anhelada casa propia, proyectando los terrenos y espacios físicos para la construcción de viviendas sociales para nuestra gente. Con instrumentos como éste debemos planificar primero los evidentes aspectos urbanos que la Comuna necesita con urgencia. Es ahora donde tenemos que acortar la brecha de la desigualdad territorial en nuestro querido Pucón.
El extender los límites de urbanización no solo debe ser un argumento válido para descentralizar los servicios que están situados en su gran mayoría en el centro de la ciudad, también debe ser la herramienta más útil hoy en día para regularizar los accesos, vías, calles y pasajes que permitan dar una conectividad segura e integrada a los habitantes de nuestra comuna.
Las carencias urbanísticas de nuestra ciudad, lamentablemente se amparan en los límites urbanos que NO han sido modificados desde 1994, debido a que el Plan Regulador Comunal no puede ser actualizado si no se actualiza el Plan Regulador Intercomunal Villarrica-Pucón, que fija las fronteras de ambas comunas desde el año 1978.
Sin duda, otra de mis principales preocupaciones de ésta demora en la actualización del PRC, es la proliferación de la gestión inmobiliaria que se ha ido ramificando por todo nuestro territorio, edificando departamentos segunda vivienda, principalmente en altura, aumentando la densidad en espacios reducidos, la carga ocupacional en pocos metros cuadrados sobre todo en época estival, vacaciones, fines de semana largos y feriados.
Esto, aparte de generarnos una preocupante congestión vehicular, saturación en los escasos accesos, deterioro en nuestros caminos, además nos causa un tremendo daño en la economía local establecida en función del turismo, cabañas, hoteles, hostales, restaurantes, comercio, artesanía y otras instalaciones que han vivido históricamente de la visita (viajeros – turistas – visitantes) que ya no ocupan estos servicios en Pucón.
Por lo anterior, soy un convencido que lo primero que tenemos que hacer es pensar en nuestra gente a la hora de actualizar el Plan Regulador Comunal. Hay una ciudadanía entera que tiene el derecho a desarrollarse plenamente en un territorio armónico y ordenado que les pertenece a todos. Tenemos la obligación y aún estamos a tiempo de planificar de mayor forma el futuro de las nuevas generaciones.
* Cristian Hernández es relacionador público, productor de eventos y concejal de Pucón
Llegó Semana Santa y, como era de esperar, con un error mayúsculo de parte de las autoridades acostumbradas a mirar normas sin considerar el contexto. Quedó en evidencia un fatal cambio de horario de atención de público en el paso fronterizo de Mamuil Malal. Por esta razón, acertadamente, los representantes de los gremios y asociaciones de turismo de la zona lacustre entregaron un oficio dirigido al delegado presidencial, José Montalva, manifestando su descontento con el cambio de horario y pidiendo que se reconsidere esta medida para no afectar la economía local.
El comprensible descontento de los gremios del turismo lacustre se debe al cambio de horario de cierre de la aduana en el paso fronterizo Mamuil Malal, lo que golpea directo al mentón a la industria turística local, ya que la medida va en desmedro del turismo regional y comunal sobre todo durante los fines de semana largo y la temporada invernal.
Porque cuando hablamos de integración entre las provincias de Neuquén y Cautín, significa que debemos establecer coordinaciones entre las partes para optimizar el uso de la infraestructura pública disponible en función del transporte de carga y pasajeros, el tránsito de turistas internacionales y el libre tránsito de los ciudadanos de ambos países hacia el país vecino, ya sea por turismo o por compras de productos, que ha marcado un notable incremento considerando lo crítica que es la situación económica y de altos precios de alimentos en nuestro país.
La medida tomada por las autoridades de Gobierno ha afectado directamente la economía de las familias de Pucón que dependen en un 90% del turismo, y se teme que de no corregirse a la brevedad serán responsables del golpe letal a la economía comunal durante este invierno.
Este error es una contradicción al turismo binacional, integrado, pero de verdad. Tantos encuentros binacionales de integración entre autoridades que finalmente son sólo “juntarse a tomar café y comer galletas” porque después en la acción, no pasa absolutamente nada.
Y para que no se diga que las críticas deben siempre traer una propuesta para apoyar el turismo binacional en la zona lacustre, sugiero algunas acciones urgentes y de corto plazo;
1. Promover el turismo de invierno: se deben realizar campañas de promoción tanto en Chile como Argentina y Brasil, destacando los atractivos turísticos en esta época del año, como los deportes de nieve, las termas, los parques nacionales, la oferta gastronómica y de alojamientos, entre otros. Algo que los empresarios locales extrañan en el rol de promoción que por ley debe realizar Sernatur.
2. Impulsar paquetes turísticos binacionales, especialmente aquellos que contemplen actividades y servicios tanto en Chile como en Argentina, para promover el turismo binacional y ofrecer una experiencia integral a los visitantes. Y en esto x 2 ¿dónde está SERNATUR?
3. Fortalecer la infraestructura turística: una que permita a los visitantes disfrutar de una estadía segura. Esto incluye la mejora de caminos, señalética vial y lógicamente los pasos fronterizos. Esto es urgente todo el año.
4. Fomentar la cooperación entre países: es necesario para promover el turismo binacional. Esto implica establecer acuerdos de colaboración entre las autoridades locales, los gremios turísticos y los empresarios para trabajar en conjunto en iniciativas como ampliar los horarios de los complejos fronterizos y por qué no pensar en una frontera única, donde no se tenga que hacer los trámites dos veces.
Al parecer las autoridades desde el nivel nacional y de La Araucanía no han entendido la realidad que vive el turismo en Chile, las regiones y las comunas, que después de la Pandemia no han logrado recuperarse a las tasas de la década pasada y que están registradas en las estadísticas del INE.
Y si, para variar, ante los problemas todos decimos que con “unidad y fe, las cosas van a mejorar”, que “si tiramos para un mismo lado Pucón se va a levantar”, pero desgraciadamente no basta con afirmaciones lindas, se requiere de decisiones y acciones concretas, de lo contrario no hacernos ilusiones y mejor tomar café y comer galletas, antes que las autoridades se las coman todas.
*Sebastián Álvarez es ex concejal, ex director de Sernatur regional, ex diputado y actual precandidato a la alcaldía por Evópoli y emprendedor gastronómico.
Teniendo absoluta conciencia de los problemas expuestos en la columna del lunes 3 de Abril por la llamada “crisis de las parcelas”, es que hace más de 6 años nos hemos hecho cargo, como profesionales en proponer soluciones concretas varias ya plasmadas en proyectos inmobiliarios de la zona, proyectos que demuestran que es posible hacer parcelaciones cumpliendo los estándares que se necesitan pensando en la sustentabilidad en el largo plazo.
No esperamos la ley, que suele ir más lento que las necesidades, hemos tomado acción, ofreciendo casas terminadas o parcelas, en proyectos con un real compromiso de conservación, reforestación, cuidado y protección de áreas naturales y cursos de agua. Creemos que es posible pensar en la sustentabilidad a largo plazo, educando ambientalmente e involucrando a los propietarios en la implementación de los planes de regeneración y reforestación con especies nativas, para goce de los mismos propietarios y de la comunidad.
Sabemos que es posible proteger además los cauces, esteros y fuentes de agua, incluimos piscinas y lagunas naturales (sin agentes químicos), tratándolas con jardines depuradores y organizar huertas orgánicas, bosques comestibles y protección de fauna nativa, generando intersticios (separación entre parcelas para que cruce la fauna nativa entre las parcelas) y fomentando el no uso de cercos, para facilitar su libre tránsito. Debemos promover el uso de paneles solares y así minimizar el estrés del actual sistema de distribución y darle prioridad a las fuentes energéticas sustentables.
Debemos considerar, además, servicios públicos y privados cercanos a los proyectos para evitar grandes desplazamientos que imponen mayor presión al caos vial que vive nuestra comuna. Creemos que estos estándares son un mínimo para proyectar a Pucón como una fuente habitacional sustentable .
Muchos de nosotros tuvimos la oportunidad de migrar desde las grandes ciudades a Pucón u otras comunas pequeñas, para privilegiar calidad de vida, más tiempo con nuestras familias, gozar de la naturaleza y un entorno sano. No es justo proponer prohibiciones, para quienes en el futuro quieran legítimamente tomar la misma decisión, con propuestas discriminatorias, que usando argumentos medioambientales, plantean: “Yo sí puedo habitar este territorio, pero nadie más”.
De alguna manera todos impactamos el lugar donde vivimos, por lo que debemos aspirar a que ese impacto sea lo más consciente y responsable posible y logremos mitigar y compensar con ideas creativas e innovadoras, que cuiden nuestros recursos naturales e incluso logren reparar nuestro medio ambiente.
Queremos sentar las bases de un nuevo estándar en desarrollo inmobiliario y que ese espíritu se replique en otras áreas como el comercio, la construcción, el turismo, etc. Somos privilegiados y junto a la comunidad y a las autoridades locales, queremos conservar este privilegio para el futuro de todos.
*Fernando Lepe es arquitecto paisajista de la Jhon Brokes University (Inglaterra) y Jaime Graf es ingeniero comercial de la U. de Chile. Ambos fundaron O42, oficina de desarrollo sustentable en Pucón.
Siguiendo con nuestra temática centrada en nuestro maravilloso otoño en La Araucanía lacustre les quiero contar de una de las experiencias más novedosas que hay en la zona. Por estos lados hay mucho de donde elegir para realizar actividades relacionadas al turismo: ascensiones al volcán, ráfting, cabalgatas, termas etc. las que corresponden a un turismo más bien tradicional en el cual salvo algunos matices la oferta es bastante similar; es por esto que es muy interesante ver como se han ido generando algunas actividades que van orientadas a que los asistentes puedan vivir una experiencia que mezcla lo vivencial con lo educativo, pero basado en el territorio y con un fuerte énfasis en los alimentos silvestres.
Es con esta idea que en el año 2019 nace Diarios de Otoño de manos de Rosario Valdivieso, Antonia Barreau y Silvia Lazzarino. Esto con la intención de crear una experiencia profunda en la que los asistentes pudiesen experimentar de primera mano lo que significa la recolección guiada por nuestro bosque, el registro de lo aprendido y la utilización de los productos.
La de este año es la 5ta edición y contará con la participación de Viviana Salazar, magíster en Ciencias Forestales de la Universidad de Concepción, quien guiará la recolección de hongos y Patricia Ayelef, cocinera mapuche quien estará cargo de mostrar la cocina tradicional pehuenche.
Este año Diarios de Otoño se realizará del 17 al 21 de mayo y serán 5 días de actividades en donde el objetivo es que los asistentes compartan entre ellos y descubran nuestros bosques a través de la observación, recolección, ilustración y preparación de lo que nos entrega el bosque como un paisaje alimentario. La experiencia incluye el alojamiento, traslados y comidas. Los invito a ser parte de esta experiencia. Si te gusta la cocina tradicional y local; esta es la oportunidad.